Se consolida la tendencia que aúna lo natural y sostenible en cosmética. Los ingredientes ecológicos, libres de químicos y las formulaciones sostenibles son la base sobre la que actualmente se apoya la innovación cosmética. En este artículo hemos querido analizar detenidamente estas tendencias en cosmética y belleza, así como las oportunidades que nacen para el sector estrechamente vinculadas a ellas.
De acuerdo con las cifras aportadas por la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética (STANPA), el consumo de productos cosméticos y perfumes creció en nuestro país durante el pasado año 2016 un 3,25% y alcanzó los 6.656 millones de euros.
Estas son las cifras de un sector que mantiene una actitud de mejora continua a través de productos más eficaces e innovadores. Cada año en España se reformula el 25% de los productos cosméticos del mercado y aproximadamente un 10% de ellos incorporan nuevos ingredientes.
La apuesta innovadora es un fenómeno internacional. Así lo vimos en el congreso “In-Cosmetics 2017” celebrado en pasado mes de abril y en el que AINIA estuvo presente. Una innovación que está basada en las tendencias de consumo actual y la preocupación por la salud y el bienestar. En la mente del consumidor estos conceptos están íntimamente vinculados a los productos, naturales, vegetales, limpios y sostenibles. Sí, también en el sector cosmético.
La estrecha relación entre el sector alimentario y el cosmético
Alimentos, bebidas y cosméticos están separados por una línea cada vez más fina. Como sabemos, los alimentos tienen un papel central en la mejora de los estilos de vida y el bienestar del consumidor actual y la belleza no es ajena a estos valores. Es más, la dieta está cada vez más ligada a la apariencia, al menos así lo demuestra una reciente investigación de GlobalData en la que se indica que el 56% de los consumidores encuestados se muestran interesados en productos cosméticos naturales.
Como consecuencia, la tendencia que apuesta por el consumo de productos naturales y de procedencia vegetal, que se originó en el mundo de la alimentación, se extiende al sector cosmético. Si el mundo de la alimentación está evolucionando a una demanda cada vez mayor de productos vinculados a la salud y de ahí al ámbito más amplio del bienestar y la estética, esto tiene una implicación cada día mayor con la cosmética. En el artículo Innovaciones que marcan tendencia en el sector cosmético profundizamos sobre esta tendencia al consumo de comida sana, alimentos frescos, productos con propiedades nutricionales antioxidantes, superalimentos y probióticos… en definitiva, “una belleza comestible” que se relaciona e interacciona con una adecuada alimentación.
Paralelamente, algunos principios activos naturales también son apreciados en las formulaciones de productos cosméticos al uso. Recientemente Mintel ha identificado 5 tipos de ingredientes gourmet que interesan al consumidor y que desea encontrarlos también en las formulaciones de los productos cosméticos que utiliza. Vitamina C (85%), ingredientes a base de frutas (78%), la harina de avena (78%), miel (76%) e ingredientes probióticos (72%).
Tendencias en cosmética 2017. Productos naturales, libres de químicos y sostenibles, también para el cuidado de la belleza
Algunos de los ejemplos de innovación cosmética que vimos en In-Cosmetics 2017 tienen un denominador común, la innovación “verde”:
• Jabones ‘libres de sulfatos’ y donde la espuma es provocada por un material tensioactivo “verde”
• Un agente gelificante natural que combina fosfolípidos y polisacáridos para cuidar la piel
• Un aceite a base de semillas de maracuyá concentrado y que aporta una notable eficacia en la reparación de tejidos
• Un contorno de ojos obtenido a partir de flores de castaño de Indias orgánico
Es un hecho que el mercado de cosmética verde está creciendo. En Alemania, la cosmética verde y los “nature-inspired cosmetics” (cosméticos inspirados en la naturaleza) ya suponen un 15% del mercado. Por su parte, el informe de Soil Assotiation sobre la cosmética orgánica revela que en Reino Unido, el mercado de este tipo de productos creció un 20% y el informe Facial Skincare and Antiaging US 2016 de Mintel afirma que los claims natural y sostenible están captando al consumidor americano con ingredientes de confianza, fácilmente reconocibles y productos libres de químicos.
Con la tecnología de los ingredientes naturales, los principios activos procedentes de los “superalimentos” son una gran tendencia. Las propiedades nutricionales de las microalgas están siendo aprovechadas por la cosmética para el cuidado de la piel, pero también despiertan el interés las semillas de chia, calabaza, quinoa, el kale, etc. Según Mintel, el desarrollo de nuevos productos cosméticos a partir de “super-ingredientes” se ha triplicado en los últimos 5 años.
Sin embargo, no es suficiente con que los productos sean naturales, el consumidor también exige que la industria aumente sus esfuerzos para utilizar prácticas de productividad más sostenibles, que permitan maximizar el valor de los recursos naturales. Para ello, la industria encuentra en la biotecnología un gran aliado.
Pero además, la industria cosmética debe ofrecer una garantía de la sostenibilidad de sus productos; por eso, las acreditaciones en este sentido adquieren cada vez más relevancia.
Eficacia, transparencia y confianza; los hechos venden y dependen del laboratorio
El informe de Globaldata que mencionábamos anteriormente, también identifica ciertas dudas por una parte de los consumidores (13%) en relación con la eficacia real de los nuevos productos naturales, en comparación con los principios activos sintéticos habituales.
Por otro lado, son preocupantes los datos recogidos en el informe publicado en Reino Unido por la Soil Assotiation sobre la cosmética orgánica que afirma que dentro de este tipo de cosméticos es frecuente encontrar ingredientes orgánicos no certificados e incluso algunos de origen vegetal pueden ser potencialmente peligrosos y conllevar problemas para salud. Los conceptos natural y tóxico no son opuestos. Algunos componentes de origen vegetal pueden ser tóxicos y otros productos pueden conllevar problemas microbiológicos, químicos… derivados de su producción o recuperación, como por ejemplo la presencia de pesticidas.
Asímismo, el consumidor exige pruebas que certifiquen que bajo los claims de eficacia, sostenibilidad, y orgánico se encuentran productos seguros y comprometidos con estos valores, más allá de la etiqueta “verde”.
En todos los casos, la clave está en el laboratorio y en la innovación tecnológica. La consistencia, la estabilidad y la eficacia son los mayores desafíos de las formulaciones de los productos cosméticos. A este hecho debemos añadir que la procedencia natural de los ingredientes de las formulaciones, así como la seguridad y eficacia de los mismos, deben estar apoyadas por pruebas, evidencias y demostraciones científicas. En el artículo Innovación y cosmética, unidas para dar respuesta a las tendencias del consumidor usted podrá profundizar en algunas de estas tecnologías.
En definitiva, la transparencia en la información de los productos cosméticos es un valor en alza a la hora de ganarse la confianza del consumidor.
Siguiendo con esta demanda del sector y la sociedad, AINIA está preparando una ambiciosa jornada sobre cosmética natural. En ella profundizaremos sobre las tendencias en cosmética y hablaremos sobres innovaciones tecnológicas con las que dar cumplida respuesta a las necesidades del consumidor actual. Si usted está interesado en asistir, póngase en contacto con nosotros a través del e-mail [email protected].