El excesivo consumo de alimentos como los dulces y las golosinas, la bollería, las bebidas carbonatadas y los embutidos, así como el consumo de cantidades cada vez menores a las recomendadas de alimentos esenciales para conseguir una dieta equilibrada, como el pescado, frutas, verduras o las legumbres, son uno de los factores del exceso de peso en la población infantil. Estos hábitos de alimentación junto con una tendencia creciente al sedentarismo en las actividades lúdicas está favoreciendo al aumento de la obesidad infantil tal y como indica el estudio ALADINO, realizado por la Agencia de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN).
45,2% de los niños y niñas de 6 hasta los 9 años con exceso de peso
El estudio recoge datos actualizados de la prevalencia de la obesidad infantil en España y ha sido realizado en casi 8.000 niños y niñas de toda España. El objetivo de este análisis era disponer de datos precisos, mediante una metodología avalada por la OMS y comparable entre países, sobre la magnitud del problema que supone el exceso de peso (sobrepeso u obesidad) en la población infantil.
Una de las conclusiones principales de este estudio es que el exceso de peso en la población infantil española se ha estabilizado en los últimos diez años, si bien afecta al 45,2% de los niños y niñas con edades comprendidas desde los 6 hasta los 9 años, lo cual supone un importante problema de salud pública.
Ante esta alarmante situación, la Nueva Ley De Seguridad Alimentaria y Nutrición aprobada recientemente, hace hincapié en las medidas especialmente enfocadas al ámbito escolar, incrementando el control de ácidos grasos saturados, ácidos grasos trans, sal y azúcares en los productos de alimentación infantil. A su vez crea el Observatorio de la Nutrición y de Estudio de la obesidad con el objetivo de disponer de información precisa sobre la realidad existente y dar continuidad a la Estrategia NAOS de prevención de la obesidad infantil y fomento de la actividad física.
Consejos prácticos para combatir la obesidad infantil
Todas las medidas que tomemos encaminadas a modificar los malos hábitos en nuestra alimentación y, especialmente, en la de los niños, pueden prevenir muchas patologías desde edades tempranas. De hecho, los alimentos que contiene azúcar, sal y grasa están directamente ligados a la obesidad infantil, por lo cual hay que actuar tempranamente para enseñar a los niños a comer de manera más saludable, aprendiendo a elegir lo que es sano y a la vez placentero.
Apuesta por una alimentación saludable
En ainia estamos desarrollando nuevos productos más saludables adaptados a los requerimientos de los niños en diferentes sectores. Algunos ejemplos:
• Reducción del contenido de grasa en productos cárnicos, tales como productos cocidos (tipo vuelta y vuelta) sin aditivos artificiales y con formas de personajes de dibujos animados, patés y salchichas tipo frankfurt, salchichas fresca de pollo poco especiadas, fiambres curados, …
• Reducción del aporte calórico en productos lácteos, tales como flanes y natillas bajos en azúcar, tartas de queso baja en grasa y azúcar, helados con un perfil de carbohidratos mejorado y aumento del contenido en fibra,…
• Desarrollo de platos preparados saludables (con menor contenido en grasa, en sal y enriquecidos en fibra, vitaminas y minerales).
• Desarrollo de productos de pescado saludables, tales como fiambres de pescado (de textura suave y bajo en grasa), productos prefritos de pescado congelados con reducido contenido en grasa, …
• Desarrollo de frutas y verduras frescas cortadas listas para el consumo (cuarta gama).
A su vez, estamos participando desdeel 2008 en la Plataforma de Cooperación Tecnológica para la aplicación de tecnologías innovadoras en el hábitat de la Infancia, PLAiTEC, con una línea de trabajo de nutrición y salud. Si quieres conocer más sobre este proyecto accede mediante este enlace.
Foto de NWSBA en Flickr