La eficacia y la seguridad son los atributos más importantes en productos cosméticos para un 86% y un 85% de los consumidores, respectivamente. Así se desprende del INFORME AINIA: “Consumidor y cosmética: Opinión y tendencias”, presentado en el marco de la Jornada de Innovación organizada por el Centro Tecnológico para analizar los retos de este sector.
Casi el 28% de los consumidores estaría dispuesto a pagar hasta un 20% más en productos de cuidado facial y de cuidado dental, si fueran más eficaces. Del mismo modo, el 27% pagaría el mismo porcentaje adicional por productos de cosmética selectiva, corporal o facial, que les garantizarán mayor eficacia en los resultados.
Además, en cuanto a lo que eficacia se refiere, el 58% cree que el producto gana en eficacia según se va liberando poco a poco tras su aplicación, frente al 11% que opina que la eficacia es inmediata.
El informe, elaborado por AINIA Consumer, el centro de estudios del consumidor de AINIA, recoge los resultados de una encuesta online realizada este mes de mayo sobre un universo de 5.000 consumidores, del que se han obtenido más de 1.200 respuestas de un colectivo de consumidores de diversas edades y ambos sexos, con un poder adquisitivo medio.
Que se hayan realizado previamente pruebas en laboratorio para comprobar la eficacia y evaluar su seguridad de los productos cosméticos es elemento esencial de compra para el 40% de los encuestados. Otro 36% señala que se guía en la compra por la recomendación de otra persona.
Las tiendas especializadas (47%) y los supermercados (48%) son los establecimientos donde los consumidores compran de manera habitual productos cosméticos. Solo un 4% los compra en farmacias.
En cuanto al envase, el 60% considera muy importante la facilidad de extracción de la totalidad de producto, y para otro 57% la facilidad de aplicación.
Potencial del sector cosmético
El sector cosmético factura más de 6.350 MM; es el 5º mercado de productos cosméticos de Europa y el 6º sector exportador del mundo. En España, el consumo per cápita de cosméticos se sitúa en 136 €/habitante/año, datos que ha facilitado Oscar Mateo, responsable del área de formación y estudios de STANPA, Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética, que también ha participado en la jornada.
Mateo, que ha destacado los 32.500 empleos directos y 150.000 indirectos que genera el sector en España, ha explicado como el 25% de los productos cosméticos son reformulados cada año y el 10% incluyen nuevos ingredientes y moléculas, por lo que la innovación es un elemento vital para el futuro del sector.
Los cosméticos más utilizados
El representante de STANPA ha señalado como, según los estudios de la asociación, los españoles cuidan cada vez más su piel: Los productos para el cuidado de la piel y el cuidado personal son los que se consumen en un 26% y 22% respectivamente.
El Informe AINIA también detecta esta tendencia, ya que el desodorante, la crema facial, enjuague bucal, crema corporal y crema de manos, son los productos más utilizados en base a una selección, eliminando aquellos productos que se utilizan de manera general por la totalidad de los consumidores.
Foto: Un momento de la Jornada AINIA sobre tendencias del mercado e innovación en el sector cosmético.
Tendencias en innovación cosmética
La Jornada de AINIA ha ayudado a poner de manifiesto las tendencias del mercado cosmético y sus problemáticas. Todos los ponentes han coincidido en señalar que el avance de la tecnología hoy día abre grandes oportunidades al sector.
Así, por ejemplo, para potenciar y alargar el efecto del producto, que es una demanda constate del consumidor, la tecnología de la microencapsulación se percibe con gran potencial de aplicación en el sector, ya que permite la liberación gradual de principios activos, mejora su conservación y consigue una mayor eficacia.
También se ha puesto en evidencia la oportunidad de diferenciación positiva con el envase, ya que innovaciones en envase que posibiliten utilizar la totalidad del producto, su aplicación e incluso su biodegradación contribuyen a aumentar la aceptación y compra del producto por parte del consumidor.
Por otra parte, si más de la mitad de los consumidores identifica la cosmética natural con productos elaborados SOLO a base de ingredientes naturales, las tecnologías limpias de extracción y purificación de principios activos a partir de materias primas naturales son cada vez más utilizadas por aquellas empresas que quieren diferenciarse en este nicho de valor.
Entre los avances en investigación, la nutricosmética, es decir, productos como los suplementos nutricionales o alimentos funcionales que ayudan a mejorar la piel, el cabello o las uñas, es la más conocida por los consumidores y la que consideran más interesante, frente a la neurocosmética o biocosmética, que son muy poco conocidas.
Los nuevos métodos de evaluación in Vitro, entre los que destacan las líneas celulares, abren también un potencial tanto para el control de seguridades (sensibilidad, que el producto no sea tóxico ni produzca irritaciones, etc), así como las evaluaciones de eficacia y funcionalidades. Y se prevé que adquieran un protagonismo creciente porque el consumidor exige que se cumpla aquello que promete.
Finalmente, las tecnologías aplicadas a la recuperación de aguas residuales en los procesos productivos de la industria cosmética, así como el diseño higiénico de equipos e instalaciones para mejorar en la inocuidad de los productos y la sostenibilidad de los procesos, han sido dos ámbitos de trabajo claros en innovación.
Ejemplos de innovaciones y nuevas aplicaciones tecnológicas
La Jornada también ha contado con José Parrilla, de la empresa fabricante de equipos industriales para el sector cosmético Instalaciones Industriales Grau, asociada a AINIA, y Néstor Jiménez, de la compañía Cleanity, especialista en el aporte de soluciones al sector en higiene industrial, quienes han expuesto diferentes innovaciones desarrolladas para el sector cosmético.
Finalmente, AINIA Consumer ha presentado una Comunidad Online para la interacción con el consumidor, así como diferentes técnicas de investigación que permiten a los departamentos de marketing e I+D identificar las motivaciones de deseo y compra, alimentando con respuestas de producto una escucha activa del consumidor.
