La higiene de equipos, maquinaria o plantas industriales es un objetivo primordial especialmente para la industria alimentaria y farmacéutica, si se quiere garantizar la inocuidad de los alimentos y fármacos. Los procesos de limpieza y desinfección requieren importantes cantidades de agua potable y el uso de agentes químicos (detergentes y desinfectantes), pero constituyen una de las principales herramientas con las que dispone la empresa para garantizar la seguridad de los productos que consumimos.Tener en cuenta criterios higiénicos en el diseño de algunas piezas en los equipos de una empresa podría suponer reducciones de hasta el 50% en consumo de agua, así como de energía y agentes químicos.
La industria en España, en general, consume aproximadamente el 25% del agua que se usa diariamente, y en datos más concretos, la alimentaria -principal actividad de la industria manufacturera en Europa (14% de la facturación total)- es la que consume, según datos de la Agencia Europea del Medio Ambiente, aproximadamente el 12% del total del agua, especialmente en tareas de limpieza y desinfección.
El diseño de los equipos e instalaciones que intervienen en los procesos de elaboración de alimentos y fármacos juega un papel decisivo en el consumo de agua, de energía y en el uso de agentes químicos. En la medida en que éstos sean más higiénicos, acumularán menor cantidad de residuos y serán más fácilmente limpiables y esterilizables. Por eso, considerar la variable higiénica en el diseño, la construcción, la instalación y el uso de estos equipos e instalaciones es una de las mejores estrategias preventivas que puede adoptar la industria alimentaria para, no sólo seguir garantizando la inocuidad de los productos, sino también reducir los consumos, y por tanto el impacto medioambiental.
En definitiva, un equipo diseñado higiénicamente conlleva ventajas relacionadas con los costes de mantenimiento y limpieza de equipos e instalaciones que tienen una importante repercusión en términos medioambientales: menor consumo energético, de emisiones de CO2, de empleo de agua, de agentes químicos y menor generación de aguas residuales.
A modo de ejemplo, cuando las instalaciones de una empresa cuentan con intersecciones de tuberías – destinadas al transporte de líquidos alimentarios- diseñadas según los criterios higiénicos, esto puede suponer llegar a reducir más del 50% del consumo de agua, de energía, detergentes y el tiempo empleado en tareas de limpieza y desinfección.
Beneficios para nuestro ecosistema
Reducir el consumo de agua y el uso de agentes químicos supone una menor generación de vertidos y una menor toxicidad, y eso a la larga supone proteger nuestros recursos naturales: mares, ríos, la calidad de las tierras donde cultivar, etc. Supone también llevar a cabo operaciones de limpieza menos agresivas y menores riesgos de contaminación de los alimentos. Además, menor presencia de estos componentes en el agua supone ahorrar consumo de energía, no sólo fruto de los propios procesos de limpieza y desinfección, sino también la energía que utilizan las depuradoras de aguas EDAR (depuradoras municipales) para su tratamiento.
Los recursos hídricos son escasos y limitados y el agua que se usa en las operaciones de limpieza es agua potable, (la misma que se utiliza para el consumo humano, regar los campos, para apagar incendios…). Una reducción en el consumo de agua en esta industria, en términos globales supondría un ahorro importante en la cifra global de consumo de agua.
En el contexto del diseño higiénico se estudian los materiales de construcción empleados, superficies de contacto (que no sean porosas), la drenabilidad, etc las intersecciones de tuberías por donde pasan los alimentos, etc. Un aspecto que cada día más está despertando el interés de las industrias, especialmente alimentarias.
Congreso Mundial EHEDG
Será en el Congreso Mundial EHEDG (European Hygienic Engineering & Design Group) que se celebrará en ainia centro tecnológico (Valencia) los próximos 7 y 8 de noviembre donde se mostrarán las últimas tendencias en ingeniería e innovación higiénica y, especialmente, las implicaciones medioambientales relacionadas con estas nuevas tecnologías.
Sobre EHEDG: EHEDG es un consorcio de fabricantes de equipos, industrias alimentarias, institutos de investigación y autoridades públicas, fundado en 1989 con el objeto de promover la higiene durante el procesado y envasado de alimentos.
Acerca de ainia centro tecnológico: ainia tiene como misión aportar valor a la empresa, liderando la innovación y el desarrollo tecnológico de forma responsable y comprometida. Pertenece a REDIT (Red de Institutos Tecnológicos de la Comunidad Valenciana), Fedit (Federación de Centros Tecnológicos de España) y EFI (European Food Institute), así como a numerosos organismos y entidades nacionales e internacionales.