Las organizaciones empresariales tienen un importante reto que abordar a corto y medio plazo. El escenario socioeconómico que tienen frente a ellas no da pie a segundas oportunidades y obliga a pensar y actuar de forma diferente para mantener ventaja competitiva.
Todo ello supone en la práctica dirigir la atención hacia el proceso de innovación, contemplándolo como piedra angular en la definición de la estrategia empresarial.
Es en este momento cuando las organizaciones se plantean algunas preguntas y empiezan sus primeras dudas.
Teniendo en consideración que la estrategia se orienta no tanto hacia la búsqueda de ventaja competitiva puntual sino más bien hacia su mantenimiento estable en el tiempo, nuestras preguntas se centran no tanto en cómo conseguir innovar, sino más bien en cómo hacerlo de manera sostenible. Y es aquí donde la gestión del conocimiento (Knowledge management) encuentra su razón de ser.
El siguiente blog nace con el propósito de establecer las bases de lo que debería ser una organización responsable y comprometida con la innovación, que como veremos pasa necesariamente por gestionar adecuadamente su conocimiento.
En este espacio trataremos de impulsar nuevas ideas e iniciativas dirigidas a articular la esencia de una organización moderna que identifica, captura, organiza, distribuye y utiliza el conocimiento existente en su entorno para generar ventaja competitiva por la vía de la innovación.
Conoceremos los distintos tipos de conocimiento (tácito y explícito) y entenderemos el proceso de conversión entre ambos (espiral de conocimiento de Nonaka y Takeuchi), pieza clave para lograr entender como una organización puede incrementar su conocimiento de forma sistemática y continua.
Comprobaremos cómo las nuevas tecnologías de la información y comunicaciones (TIC) han supuesto el motor de esta nueva área del Management, y daremos las claves para seleccionar cuidadosamente la tecnología, especialmente el software, de modo que actúe como verdadero respaldo a los procesos GC.
Tendremos la oportunidad de analizar en detalle las comunidades de práctica, grupos sociales constituidos específicamente para desarrollar un determinado conocimiento especializado, y comprobaremos hasta qué punto tienen sentido en el marco de una organización empresarial.
Revisaremos los distintos modelos organizativos para comprobar las bondades de cada uno de ellos y entender de este modo el más aconsejable para garantizar una correcta gestión del conocimiento.
En definitiva reflexionaremos intensamente acerca de todos y cada uno de los elementos que intervienen en la constitución de una organización que aprende de sí misma y crece constantemente, una organización que tiene en la innovación su norte y guía.
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